Page 36 - REFORMAS INCLUSIVAS, ACTORES CRITICOS Y REPRESENTACION POLITICA DE LAS MUJERES EN AMERICA LATINA - FLAVIA FREIDENBERT

Flavia Freidenberg

tienen que ver con los prejuicios y estereotipos del público respecto a las
capacidades de las mujeres, así como también respecto al modo en que
ellas ejercen el liderazgo y la manera en que son percibidas por los demás
(Setzler 2019). Las expectativas sobre el papel de la mujer en la esfera
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pública impiden que ellas sean vistas de manera similar a los hombres
(Došek et al. 2017). Ese sesgo de género, a partir del cual las mujeres
pueden perder la elección debido a las preferencias sexistas de los electores
copia
(Lawless & Fox 2005), suele agravarse en culturas patriarcales, jerárquicas,
machistas y reivindicadoras de lo masculino. Los cuestionamientos son
sobre su experiencia, su palabra, su autoridad, su disponibilidad horaria
(sobre todo si son madres y esposas), de quién son cercanas o a qué
grupos pertenecen y sus condiciones para ejercer el liderazgo.
Segundo, los obstáculos partidistas tienen que ver con el hecho
de que los partidos están generizados, lo que significa que reproducen
reglas, valores y prácticas donde las mujeres no cuentan con las mismas
oportunidades que los hombres dentro de las organizaciones partidistas.
Aun cuando la mayoría de las militancias de los partidos latinoamericanos
están integradas por mujeres, las dirigencias no las ven o no las consideran
36 aptas para ser candidatas y, mucho menos, para ganar una elección (Llanos
y Rosas 2018; Morgan y Hinojosa 2018; Kenney y Verge 2016). Una
investigación realizada recientemente sobre 123 partidos de dieciocho
países de América Latina da cuenta de que solo diecinueve organizaciones
de partidos tienen una presidencia femenina (#ObservatorioREFPOL
2020).
Una forma de resistencia a la creciente representación de las mujeres
en la política es la violencia de género contra las mujeres por ser mujeres.
Cuando ellas ejercen liderazgos autónomos, se convierten en una amenaza
al statu quo, al modo en que se venían haciendo las cosas. En ese escenario,
por lo general, los hombres las violentan al sentirse desafiados (Muñoz-
Pogossian y Freidenberg 2020; Freidenberg y Del Valle 2017) y los partidos

14 Se entiende por “estereotipos de género” las creencias, imágenes e ideas generalizadoras y so-
cialmente compartidas que se consideran propiamente femeninas (o masculinas) y que guían la
formación de ciertas expectativas, evaluaciones y formas de ser en torno a la conducta esperada de
los individuos “estereotipos de género” (García Beaudoux 2017: 37). Las personas de cada género
son percibidas de una determinada manera, en función de una serie de roles, de lo que se espera
que ellas hagan y de cómo se considera que ellas deben comportarse en la vida familiar, en la políti-
ca, en la vida profesional o en la relación con los demás.